En las últimas semanas, los medios de comunicación se han apresurado para presentar una “nueva y fresca” formación política: Ciutadans/Ciudadanos (C’s). Lo cierto es que de nueva tiene poco y cuentan con un dilatado recorrido que muestran muy a las claras de dónde vienen. Para empezar, su líder Albert Rivera, es un pijo de manual. Un licenciado en Derecho por la privada, antiguo militante de las Nuevas Generaciones del PP, toda una declaración de principios. De hecho, apenas se puede hacer distinción ideológica entre PP, UPyD, VOX y C’s. Es frecuente encontrar trasvases entre uno y otro partido, tanto de militantes, simpatizantes y votantes. Sólo hay que recordar que la formación política de Rivera concurrió en las elecciones europeas de 2009 en coalición con la de extrema derecha Libertas, algo que permite adivinar cuál es su base ideológica. Porque aclaremos una cosa: C’s no es de izquierdas, ni de centro-izquierda, ni siquiera de centro, C’s es la marca blanca del PP.
De hecho C’s nació articulándose contra el nacionalismo catalán, a partir del cual ha extraído buenos réditos electorales: frente al nacionalismo periférico, nacionalismo centralista. Vienen a decir “somos ciudadanos, honrados y españoles”. Una fórmula bien sencilla y, en ocasiones efectiva, pero que dice bien poco de quiénes son en realidad.
En su página web exponen que su ideario procede del “liberalismo progresista y el socialismo democrático”. Un batiburrillo difícil de armonizar que es tanto como decir que eres del Madrid y del Barça, del Betis y del Sevilla. Esta ambigüedad perfectamente calculada tiene que ver con la búsqueda de un electorado amplio entre las clases medias descontentas con el bipartidismo, pero que la vez sienten un miedo infundado a perder su ilusoria situación de estabilidad. Es el “virgencita, virgencita, que me quede como estoy”.
Sorprende que los principales medios de comunicación, tan hostiles con una fuerza política renovadora como Podemos, muestren una actitud tan complaciente con C’s. ¿Por qué?
Para entenderlo tenemos que retroceder en el tiempo unas semanas. El pasado 28 de enero, el Banco Santander compraba las portadas de los principales diarios. El mismo día, ¡con un par! Fuese cual fuese tu elección para informarte, ahí estaba el banco de Botín para recordarte qué comprabas. En el kiosko ya no elegías entre El País, El Mundo, La Razón, ABC o 20 Minutos, elegías entre Banco Santander, Banco Santander y Banco Santander. Quien paga manda. Ese día 28 de enero las portadas reflejaron lo que el resto de días leemos en las páginas interiores: los poderes financieros controlan los medios de comunicación. Sobre esto, resulta muy interesante echar un vistazo al documental Una mosca en una botella de Coca Cola, dirigido por Javier Couso.
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| Portadas de distintos diarios el 28 de enero de 2015 |
De un tiempo a esta parte, los principales medios de comunicación vienen presentando a Albert Rivera y C’s como el “cambio sensato”, “la renovación segura” o “las ideas frescas”. Como es evidente, quienes se están forrando con la situación actual no pretenden que se produzca ningún cambio. Así, mientras que por un lado se agita el miedo contra Podemos, se lanza el siguiente mensaje: “usted, señor o señora descontento con el bipartidismo, no caiga en arriesgadas aventuras de cambio político, no dé crédito a los populismos que llevan al desastre”. En definitiva, se trata de dar una falsa alternativa dentro del mismo sistema. Disfrazar el discurso fascista de socialdemocracia. Cambiar algo para que todo siga igual. La misma receta de siempre.
Es como aquel personaje de La vida de Brian que aseguraba al protagonista “yo digo que eres el mesías y de eso entiendo porque he seguido a varios”. Pues eso, los mismos voceros del bipartidismo ahora nos venden su renovación, sus nuevos productos. No cuela.
A poco que uno rasque en la superficie, encuentra puntos oscuros en C’s. En el Parlament Catalán se presentó una moción para oponerse a la retrógrada Ley del Aborto de Gallardón. Albert Rivera y los suyos se abstuvieron eludiendo cualquier tipo de posicionamiento. También en el mismo foro, se mostró junto con el PP, favorable a limitar la asistencia sanitaria para inmigrantes irregulares, es decir, ni más ni menos que dinamitar la universalidad de la sanidad.
Pero hay más. Es muy llamativo el silencio mediático existente con determinadas actitudes de los componentes de C’s. Veamos:
- Manuel García Florido, candidato de C’s al municipio de Viladencans, se dio de baja del partido y pasó a formar parte de la xonófoba Plataforma per Catalunya. (Enlace)
- Antonio San José, Secretario de Alcaldía de Medina del Campo, ha sido denunciado e imputado por irregularidades administrativas en su cargo. La formación política en la que milita San José, el Partido regionalista de Castilla y León, se ha integrado en C’s. (Enlace)
- El portavoz de C’s, Jordi Cañas, imputado por fraude fiscal de 429.000 €, después de renunciar a su escaño en el Parlament, es contratado a dedo como asesor en el Parlamento Europeo. (Enlace)
- Miguel Cazorla Garrido, candidato a la alcaldía de Almería capital por C’s, está acusado de un delito de apropiación indebida. (Enlace)
- Juan Carlos Ferrando, coordinador de la junta local de C’s Mataró, fue obligado a dimitir cuando era concejal del PP por mediar en la apertura de un burdel. (Enlace)
- Manuel Erdozain, secretario general de C’s Cádiz, es investigado por un juez por delitos de tráfico de influencias y prevaricación, cuando era delegado de urbanismo por el PP. (Enlace)
- El candidato a la alcaldía de Málaga, Juan Cassá, es denunciado por ex militantes de C’s (agrupados en otro partido) por falsedad documental. (Enlace)
- El partido evita la transparencia en su financiación, al burlar el control del Tribunal de cuentas en Cataluña, al haber sido registrado en Madrid. (Enlace)
- Javier Nart, eurodiputado de C’S, posee una cuenta en Suiza. (Enlace)
Si todos estos casos, de mayor o menor gravedad, en lugar de ser protagonizados por militantes de C’s, lo hubiesen sido por gente de Podemos, es fácil imaginar el escándalo que se produciría. Titulares, editoriales, conexiones en directo, persecuciones a los protagonistas...
Pero C’s no es peligroso para el poder, al contrario. Representa la misma fórmula del bipartidismo con un envoltorio nuevo. Otro partido del Ibex-35 con palabras amables y promesas vacías para las clases medias. Neoliberalismo, desregulación de mercados e individualismo, todo ello aderezado con unas gotitas de xenofobia, clasismo y lenguaje empresarial. Los mismos perros, distinto collar. La misma mierda, bañada con Chanel nº5.
Bibliografía
Ciudadanos, la operación Podemos de derechas se consolida.
Albert Rivera y el auge de Ciutadans, el triunfo de la ambigüedad.
Ciudadanos, ¿un Podemos sin "lo malo" de Podemos?
Desmontando a Ciudadanos. Blog Rabia y Sur.
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